Las alegaciones ecológicas son autodeclaraciones que el productor hace al mercado para comunicar las características medioambientales de un producto, por lo que pueden ser herramientas utilizadas para orientar la elección del consumidor: son, por tanto, prácticas comerciales.
UNI EN 14021 tiene por objeto armonizar las autodeclaraciones medioambientales de los productos, con el fin de comunicar únicamente mensajes correctos, demostrables, veraces y científicamente válidos.
De hecho, estos principios son fundamentales cuando se trata de alegaciones ecológicas y prácticas comerciales en general para evitar el riesgo de «lavado verde», es decir, comunicación no veraz, engañosa y no verificable científicamente; aspectos también considerados en el Código del Consumidor.
A este respecto, la Autorità Garante della Concorrenza e del Mercato (AGCM) – con la disposición núm. 28060, de 20 de diciembre de 2019- aclaró que las declaraciones medioambientales «deben indicar los beneficios medioambientales del producto de manera oportuna e inequívoca, ser científicamente verificables y, por último, comunicarse de manera correcta», y que «una declaración medioambiental correcta debe transmitir información adecuadamente documentada, científicamente «verificable» y limitada a aspectos específicos verificables en clave comparativa con respecto a productos homogéneos».
¿Existen sanciones por prácticas comerciales desleales?
Se prevén multas administrativas de entre 5.000 y 5.000.000 de euros, teniendo en cuenta la gravedad y duración de la infracción.
La deslealtad de la práctica comercial se establece a través de un procedimiento administrativo que puede ser iniciado de oficio por la AGCM o por notificación de un consumidor, un competidor o cualquier otra parte interesada.
¿Qué ejemplos hay de «lavado verde»?
- 100% reciclable. Las características de un envase determinan si es reciclable o no, algo que no se puede medir. Por tanto, no tiene sentido acompañar esta característica de una medida porcentual.
- Uso de etiquetas no oficiales y/o de producción propia para comunicar la sostenibilidad de los envases. La proliferación de etiquetas y mensajes medioambientales aumenta la confusión del consumidor. Es importante remitirse a una norma para adoptar un lenguaje y un código inequívocos y comprensibles para los consumidores.
- Declaraciones que no contienen información fiable que respalde lo que se afirma, así como información vaga, poco clara y sin sentido. Por ejemplo, afirmaciones genéricas como«envases sostenibles/ecológicos/de bajo impacto/de impacto cero/ecológicos/respetuosos con el medio ambiente/verdes/naturales» no son fiables a menos que estén validadas por datos y criterios científicos.
Última modificación el 04/10/2023