Aquellos que se ocupan de los gráficos y la forma del etiquetado medioambiental tienen libertad para elegir el estilo gráfico, la forma y los colores del etiquetado medioambiental. La norma no tiene fórmulas precisas pero recomienda que los envases estén debidamente etiquetados, con una visión orientada a lograr el objetivo.
Se asume que la etiqueta debe ser clara, no engañosa y fácil de entender por cualquier consumidor.
Última modificación el 03/12/2021