Los nombres de marca también entran en el ámbito de aplicación de la nueva Directiva 2024/825/UE. Si tales nombres hacen referencia a cuestiones medioambientales o sociales, hay que poder demostrar su veracidad como en el caso de cualquier otra declaración ecológica. Por ejemplo, si un nombre de marca incluye la palabra genérica «verde», todos los productos comercializados con ese nombre de marca deben tener una certificación independiente de terceros de reconocida excelencia en el comportamiento medioambiental.
Última modificación el 10/01/2025